Juan Cruz Córdoba fue asesinado de forma bestial: amordazado, maniatado y rematado de tres tiros . Su tío descubrió su cadáver este domingo por la noche, cuando fue a la casa de su sobrino, ubicada en el barrio Cabaña Leiva de Santa Fe capital, luego de varios intentos de comunicarse por celular, indicaron fuentes del caso a Infobae. Allí, encontró el cuerpo sobre un charco de sangre.
Luego, llegó la Policía.
Cuando el forense de la Agencia de Inteligencia Criminal revisó el cadáver, pasadas las 20.30, constató heridas de arma de fuego en la cara interior del cuello y el cráneo.
Además, el médico de policía notó una herida cortante en la oreja izquierda y otra en el dedo índice de la mano derecha. De acuerdo a información de la causa, en la que interviene la fiscal Ana Laura Gioria, faltaban elementos de la víctima como la billetera y el celular. Córdoba ocupaba de manera transitoria y que es, precisamente, propiedad de su tío.
Los peritos, además, encontraron una muestra de aparente sangre que corría desde la puerta de ingreso de la casa y de las paredes de la cocina. Del piso de ese mismo ambiente secuestraron una frazada con sangre, tres vainas servidas, un proyectil encamisado y otro plomo “desnudo y deformado”. También incautaron una cuchilla de un modular, un cartucho intacto y el personal balístico secuestró un rifle de aire comprimido calibre 5,5 -marca Krico- que se encontraba sobre la mesa.
Los agentes encontraron, al mismo tiempo, una balanza de precisión y, dentro de un recipiente plástico con tapa, un envoltorio con cocaína, por lo que la Brigada Antinarcóticos de la AIC debió sumarse a la investigación en la que también participa la subcomisaría 18 y efectivos del Comando Radioeléctrico de la Policía de Santa Fe, precisaron fuentes del expediente.
Por otro lado, señalaron que los investigadores no lograron dar con testigos. En cambio, encontraron cierta hostilidad de los vecinos que se negaron a dar detalles sobre las últimas horas de Córdoba, sus actividades ni quiénes pudieron entrar al domicilio. Pudieron saber que la víctima era consumidor y, por el momento, no hay indicios que lo vinculen con una organización criminal. Pasada la medianoche, los policías dejaron la casa. Ahora esperan el resultado de las pericias para poder avanzar con la causa.
Una de las hipótesis que estudian los agentes es que el asesino, si actuó solo, pudo haber llegado a la casa en busca de algún elemento de valor, debido a que los detectives encontraron un gran desorden y faltaban elementos, aunque no dieron más precisiones para no entorpecer el avance de la investigación. No descartan, asimismo, que se trate de una venganza o ajuste de cuentas por drogas.
El de Córdoba fue el homicidio número 36 en lo que va del año en jurisdicción del departamento Capital, cuya cabecera es la ciudad de Santa Fe, precisó la agencia Télam.
Fuente Infobae